Por fin, tras años de espera ya tenemos a nuestro alcance Mafia II. Se ha hecho esperar, y ha llegado el momento de analizar en este espacio de artículos aleatorios y trasnochados esta obra de entretenimiento. La sensación tras haber jugado a Mafia II es de muchas sensaciones opuestas y enfrentadas.
Por un lado el juego es una pasada, por otro podría haber sido mejor. Pese a ello, los checos han vuelto a realizar un trabajo fantástico digno de aplauso. Los que han jugado al Mafia: The City of Lost Heaven y les gustó, encontrarán mucha similitud en la secuela, los que no, disfrutarán de un sandbox de calidad.
Pero no puedo sin más encabezar mi análisis con una sensación de decepción por parte 2K Games, y es que mis esperanzas depositadas en una compañía que demostró una gran calidad de trabajo y buen gusto se han venido abajo tras ver su nueva filosofía de trabajo. Mafia II es un buen producto, fiel a su línea de juego pero mutilado en su contenido y que ha no ha querido aprovechar todo su potencial con un más que sospechoso ánimo de lucro.
Sobre la historia de esta nueva entrega, encarnamos a Vito Scaletta, un joven de origen siciliano quien, tratando de evitar el camino de su padre, es decir, matarse a trabajar por cuatro perras, elige la vía del crimen para conseguir sus objetivos. Es decir, ser alguien en la vida. El punto de partida de Vito puede sonar bastante pueril, pero desde luego es convincente.

¿Qué elementos de Mafia I encontramos en Mafia II?
Historia cinematográfica
2K Czech no ha cambiado su forma de trabajar, pese a lo que se estila hoy día el tipo de juego abierto con total libertad, decidiendo las acciones a tomar. Y eso les honra. Funcionó bien en el primer juego y por tanto las tendencias no deberían hacer que el segundo sea mejor.
Aún así la tentación es grande; poder decidir si ser un gángster respetable y con principios, un matón indisciplinado, un psicópata sin escrúpulos, etc. Pero no es así. Una buena fórmula siempre será una buena fórmula, lo mismo en los videojuegos que en el cine, la música y demás disciplinas.
El juego es completamente lineal, cerrado. Quizás puedas resolver las misiones de formas distintas, pero eso jamás afectará el desarrollo de la trama, la cual avanza cual guión cinematográfico conforme van pasando los años. Eso no implica que no puedas relacionarte con el ambiente que te rodea, puedes visitar cualquier establecimiento en la ciudad y hacer el cafre todo lo que quieras y dejar la misión principal esperando, pero que nadie espere evolucionar al personaje según sus propias decisiones. Nosotros encarnamos a Vito y no tomamos las decisiones por él.
La parte mala: esta no es una auténtica historia de mafiosos. El que espere integrarse en una familia y disfrutar del ambiente gangsteril como se hizo en el anterior juego, no lo va a encontrar aquí. Esta es más bien la historia de Vito metiéndose en la Mafia y haciendo lo que más le interesa. Seguimos a Vito y lo demás es secundario.
La ciudad

Empire Bay en esta ocasión. Una ciudad americana a nuestro alcance, bien definida, bien creada, bonita detallada y disfrutable. Los paseos en coche son el punto de fuerte de ambos coches y en Mafia II se mantiene. Si bien la primera sensación es algo descafeinada esto se debe a que la ciudad de Empire Bay comienza su relato durante el invierno y la nieve le da un aspecto uniforme y algo monótono. Pero como siempre, con el calor llega lo bueno. Como en el uno, la ciudad es la protagonista y testigo del juego.
Pero hay cosas que no se pueden ni deben perdonar. Lo que convertía a Lost Heaven en una auténtica ciudad era lo detallada que estaba, y es que en Empire Bay no vas a encontrar ni el tren elevado ni los tranvías a los que podías subirte, ni puentes levadizos, ni barcos que pasan. Encontrarás estaciones de metro cerradas y lamentablemente, jamás dejarás la ciudad para ir a la afueras (recuerdo la granja, el motel y el aeropuerto del 1).
El mapa es un desastre, el cual en lugar de mostrarse sobre el juego en acción, lo detiene arruinando la experiencia de juego, y no deja nada claro donde está cada barrio a no ser que te dediques a perder el tiempo pasando el ratón por encima. El «sistema GPS mágico» implementado es una completa basura. Pase que en el primero te marcasen tu objetivo en el mapa que podía ir corriendo a toda guacha, pero que te pongan una línea mágica diciéndote por donde tienes que ir para llegar a destino puede ser cómodo y práctico, pero también es aburrido y sin sentido. Elimina todo esfuerzo hacia el jugador para que tenga que aprenderse y conocerse la ciudad, tomando referencias, etc. Vamos, que presupone que el jugador o bien es vago, o bien es idiota, o bien las dos cosas. Esto le hace perder muchos puntos.
Coches de época

El otro plato fuerte. Los nuevos vehículos se han adaptado fielmente a su época (mediados de los 40-50). Y esta vez los coches corren más, como es lógico. La calidad de imagen del Mafia II combina los modelos de los vehículos perfectamente con la ciudad y crea un efecto realista digno de aplauso. A destacar que ahora se puede ir a un taller a reparar, pintar, tunear y cambiar llantas y matrícula. Detalles menores, se puede vivir perfectamente sin eso, pero detalles al fin al cabo. Lo grande: usar la radio y cambiar de emisora, disfrutando de los clásicos de la época. El cóctel de Empire Bay, vehículos y música es una borrachera estupenda y sin resaca.
¿Lo malo? Los modelos son bastante repetitivos, pero no se perdona que no se permita disparar al jugador a través de la ventana. MAAAAAAAAL.
Armas
Recuperaremos la mayoría de armas del primer juego, pero sin el encanto que tenían en la primera entrega, y es que las comparaciones son inevitables. Pero eso ya lo sabemos.
Lo que no tiene ninguna, pero ninguna lógica es eliminar el menú de inventario. Podrás cargar todo un arsenal, tres o cuatro tipos de ametralladoras escondidas bajo una chupa de cuero. Esto hace siete o incluso cinco años era perdonable, pero en un juego moderno no. Además tampoco puedes deshechar las armas que no te gusten. Te las llevas sí, o sí.
Música de época
Como he comentado antes, aparte de la banda sonora original del juego, disfrutaremos de piezas míticas italianas y éxitos de los Estados Unidos de los cincuenta. No es Mafia si no hay buena música.
Lo único malo es que darle la banda sonora a los recorridos en coche elimina la música que en el uno cambiaba según el barrio, lo cual los hacía más únicos y distinguibles.
Detalles, detalles, detalles
Ya los disfrutamos antes, y los volvemos a disfrutar aquí. La ciudad tiene vida, sus habitantes, peatones y conductores también, esta vez incluso menos estúpidos que antes, lo cual es un alivio. Tanto los exteriores como los interiores son fantásticos. Las ropas, que esta vez podemos elegir, la iluminación (un 10), los cielos, etc.
Pero lo peor para mi, el gran fracaso ha sido en la jugabilidad.
Para empezar es más difícil sacarse un moco que terminar Mafia II. En serio, jugad en modo difícil o será como sacar a pasear a tu abuela. Hacedme caso. El nuevo sistema de regeneración de vida es terrible, algo muy típico de los juegos de ahora (véase Mass Effect) y basta con cubrirse contra una pared para que todo esté como antes de ser tiroteado. Si juegas en modo normal sumado a la regeneración de vida eres como una especie de Terminator masacrando gatitos. Además, tus compañeros son invencibles. En el primer Mafia era mucho más probable que acabases/n volándole la cabeza a Sam y teniendo que volver a empezar. En Mafia II se comerán los tiros como si fueran maíz en lata. El botiquín es sustituído por el poder mutante de Lobezno. A Vito solo le falta huesos de adamantium.
La jugabilidad no es tan libre y disfrutable como en el primero, en el cual puedes ir y venir y resover las cosas más o menos como venía en gana. En este te dicen paso a paso lo que hay que hacer, como si el jugador tuviera las neuronas constreñidas. Pon la bomba. Abre la puerta. Cámbiate de ropa. Coge el teléfono. Esta es otra constante de los juegos actuales, su nivel de dificultad. Pírrico.
Sé que me repito, pero el mapa es horroroso y me recuerda con náuseas a la infame, infumable, nefasta, temible adaptación videojueguil de El Padrino. Cierto que ver el plano a la vez que se conduce era confuso al principio, pero aquí ya se dispone de GPS, pudiendo marcar a donde se quiere ir. Práctico mucho, pero poco realista, pardiez, lo cual junto a la regeneración de vida automática hace perder puntos a un estilo de juego que siempre busca el realismo.
Detalles como los talleres, gasolineras, armerías, tiendas de ropa están muy bien, son un añadido excelente, pero cuando ves el mismo personaje en todas las gasolineras o al mismo mecánico en los talleres te acabas hartando bastante. ¿Qué en el uno era así también? Claro, pero en los juegos de hoy se espera que no ocurra. Podrían haber hecho un poquito más de esfuerzo, copón.
Personajes desaprovechados. Conoces a un tipo en un desguace que te envía a robar un coche. Lo identificas con el Lucas Bertone del anterior, quien siempre te encargaba alguna misión secundaria opcional para conseguir coches fantasbulosos que ostentar en tu flamante garage (el cual no vas a lucir en este juego). Y siempre eran un desafío. Pues aquí no. Este tipo solo sirve para que lleves coches a la prensa y ganes 400 pavos por coche destruido. Decepcionante.
Conoces a un tipo que controla el sindicato de estibadores y te encarga un trabajito, asegurándote que tendrá más para ti. Mentira. No vale la pena perder tiempo visitando ni el desguace ni el puerto. Cacafuti.
La familia no existe. No hay sensación de estar trabajando para la Mafia. Vas a tu casa, a casa de tu amigo y luego al bar a ver a tu jefe. Cierto, pero no sensación de hogar, de cuartel, de formar parte de una banda. No tenemos el bar donde vamos siempre a que nos encarguen el trabajo, donde escoger el coche y las armas. Entiendo que cambien esto, pero no entiendo que hayan cambiado ese pedazo de garage por una caseta cerrada cerca de tu casa para escoger el coche como si fuera escoger el mochín del Mortal Kombat. Triste. Y sobre todo echo de menos un personaje que se dedique a reparar tus coches después de cada trabajo. Quién diría que echaría de menos al tontaco de Ralph. En serio, si jodes un coche, hasta que no lo arregles seguirá jodido.
La policia de Empire Bay está en alguna parte en el difuso camino entre lo subnormal y lo lamentable. Sáltate todos los semáforos que quieras que ni se darán cuenta. Las barricadas dan risa; un triste coche patrulla cortando la calle. Realmente, el departamento de policía de Empire Bay tiene mucho que aprender del odiosamente eficaz departamento de Lost Heaven. Habrá que iniciar una recaudación de fondos para ellos porque parece que lo necesitan de verdad. Bromas aparte, si queréis darle una oportunidad a la pasma, usad el modo difícil.
Y lo peor de todo, ¿dónde está el Viaje Gratis? ¿Por qué no nos han dejado la oportunidad de hacer el cafre por Empire Bay del mismo modo que lo hacíamos en Lost Heaven? ¿Y la locura del Viaje Gratis Extremo? Que no, que han decidido eliminar una de las opciones más populares del primer juego y sobre la que se basaba toda la comunidad de modding (modificaciones por aficionados). Espera, ¿modding has dicho? Claro, ahora todo buen estreno incluye DLC (Downloadable Content aka Contenido descargable). Y ya han soltado una expansión tipo arcade. ¿Será el Viaje Gratis lo siguiente? ¿O habrán querido evitar que los aficionados creen nuevas expansiones por su cuenta, poniendo en peligro la venta de DLC? ¿Serán DLC también las múltiples misiones que se han quitado del producto final y que formaban parte de la historia principal? ¿2K Games nos ha robado contenidos para vendérnoslo en pequeñas dosis? Como muestra de esto, en la comunidad modder ya ha salido alguien integrando el Viaje Gratis, pero solo para la versión en inglés del juego. Tras probarla, me llevo la sorpresa de que está completamente traducido al español y con pequeñas misiones, también en español. Eso solo puede significar una cosa, y es que todo eso ya venía dentro del juego, pero 2K Games decidión no activarlo para el jugador. Vaya, vaya, vaya.

¿Alguién ve el Viaje Gratis (Freeride) en el menú principal?
Sí, le he dado al juego un palo. Pero las comparaciones son necesarias, y es que es de esperar que si no se supera a la experiencia del anterior juego, al menos sí se iguale. Y Mafia II, por más bonito que sea gráficamente, no supera al I. Y yo, como buen fan de The City of Lost Heaven, tenía muchas expectativas puestas en la gran calidad y talento que habían demostrado los checos.
Aún así, Mafia II es un buen juego, y lo recomiendo, aunque parezca mentira, desde luego. Si disfrutaste con el I, con este también lo harás. Y estoy seguro que la comunidad modding, los nuevos DLC y algún que otro foro de enlaces (ejem) nos permitirán disfrutar plenamente de Empire Bay.
Plataformas:
PC
PlayStation 3
XBox 360
Enlaces de interés:
Mods para Mafia I y II (incluye Freeride)
-Algunas veces te sales con la tuya, otras no.
Vito Scaletta
-Juansaman